Te iba a llamar...
Tenía que escribirte pero soñé que no estabas, que te habías marchado sin despedirte...
Por eso aprovecho para decirte que te quiero mucho amigo. Que eres bueno, que tienes un corazón gigante y que me gusta tu tono de voz cuando te enfadas.
Que no hay mejor compañero que tú para quejarme de la política, del tiempo, de la educación, de la vida...
Está bien enfadarnos con el mundo, relaja.
Perdón por todas las llamadas que te debo, por los abrazos que te prometí y no te llegaron, por los cafés que están pendientes. A partir de ahora no te van a faltar.
Cuando te llame dime "-Hola corazón " con el mismo tono de voz de siempre.
Cuando te escriba respóndeme con infinita paciencia, que ya sabes que de tanto que escribo, me enredo.
Que susto! Soñé que te habías ido y no podía despedirme.
Que miedo! Que tengas un amigo y ya no esté y que nadie te lo cuente...
Sería una pena perder a un tipo como tú, así de rebelde, de tranquilo, de tenaz, de implicado, de coherente...
Voy a llamarte o te escribo ya. Prometo darte ese abrazo pronto y se me pasará este llanto que me lleva persiguiendo todo el día.
Pero no puedo amigo... no era un sueño.
(Donde quieras que estés tú o tu recuerdo: gracias y perdón )
Una maravilla, como todo lo que haces !
ResponderEliminarLas palabras que tienen un sentir son únicas... Me encanta!! Y gracias, hoy en mi caída me has ayudado a poder agarrarme y no perderme en la oscuridad... Te quiero amiga
ResponderEliminar